sábado, 22 de mayo de 2010

Como aguas que pasaron...



Arremolinada entre las aguas del olvido, casi asfixiada entre el tumulto de las horas que sepultaron tus vivencias...allí estás.
Así estás, enredándote entre las ramas que fueron nido y hoy se entremezclan con el verde musgo de lo que se ahogó por las aguas que pasaron.
Quieta...
como la roca que inmóvil permanece en el tiempo, siendo testigo de lo que sigue, de lo que la atraviesa, sin siquiera moverla un centímetro de su realidad.
Allí, cubierta entre el frío y las burbujas de lo que naufraga sobre tus recuerdos...eso has sido, eso serás.
Serás frío, serás hielo, serás recuerdos, serás soledad.
Despiertas, en medio de las aguas, esquivando los mohos de aquello antigüo que pasó.
Y se enrieda tu pelo, cobrizo y arremolinado, entre las rendijas que simulan atisbos de libertad, entre las rocas apretadas que te sumerjen sin piedad.
Pero eres ave y tocaste el cielo.
Surcaste vuelos, quieres libertad!
Y te enciendes, como pólvora revuelta, enhebrando hilos entre tus plumas quebradas.
Y te deslizas, entre las rendijas, y respiras viento y miras detrás...
Como aguas que pasaron, es el título del cuento.
Como aguas que pasaron y que no volverán.

1 comentario:

Anónimo dijo...

mmmmmmmmm
mi amiga
una de las que quiero tanto.
te abrazo fuerte.
Charli*
Desde este lado del mar.